EVITAR LA DEPRESIÓN CAUSADA POR EL DESEMPLEO.

Tal como referimos la semana pasada vamos a abordar la dimensión emocional del desempleo.
Muchas investigaciones señalan que la pérdida del trabajo y el desempleo involuntario de larga duración son unas de las experiencias más frustrantes a las que puede enfrentarse un ser humano. Esto es una realidad porque el trabajo desempeña en las personas dos competencias básicas: por una parte, responde las necesidades primarias (alimentación, vivienda y manutención, entre otras.) y, por otra, atiende las demandas de autorrealización.
Cuando quienes estamos en búsqueda activa de empleo hemos trabajado....teníamos plena conciencia de satisfacer plenamente todo lo referido a nuestra manutención y a nuestra autoestima.
Quizás sea esta última cuestión la que más pasa por alto la sociedad actual. Actualmente se percibe mal la explotación directa del trabajador pero, con frecuencia, no se aprecia una relación directa de quienes trabajan como un modo de crecimiento personal y de felicidad.
El desempleo es el reverso de la actividad laboral. Los desempleados tenemos una carencia de la misma y , por tanto, debemos luchar lo posible para evitarlo No podemos negar que el desempleo  involuntario es una situación frustrante y, por tanto, negativa en sí misma.
Ante esta realidad nos planteamos que podemos hacer para reducir los daños psicológicos que nos genera un desempleo involuntario y de larga duración.
Creo que muchas de las personas que nos encontramos luchando por alcanzar nuestras metas laborales hemos vivido que, quizás, la mejor forma de salir de este torbellino desalentador de la carencia de empleo sea la denominada " adaptación creativa".
Eso sí cabe matizar, en esta noción, que el término adaptación no conlleva una connotación pasiva si no que se utiliza en el sentido de procurar exprimir la experiencia negativa del desempleo y transformarla en algo que fomente el crecimiento individual de quienes vivimos dicha realidad. Además debemos centrarnos, admitiendo nuestras limitaciones y posibilidades, y empezar a andar por el camino que delimita el conflicto. Así, la oscuridad y las tinieblas se pueden ir diluyendo.
De este modo, debemos concebir la adaptación creativa como forma que los desempleados tenemos de tomar conciencia de nuestras dificultades específicas, con sus opciones y sus desventajas, que fomenta que pongamos en marcha una serie de acciones para reconducir nuestra situación.
Precisamente, en la próxima publicación, veremos en que consisten estas actividades.