COMER SANO NO TIENE QUE SER CARO
Llegado
a este punto y una vez expuesto en otros
post lo relacionado con el estrés, alimentación saludable para afrontarlo, me podéis
decir, porque quien no lo ha pensado alguna vez, es que llevar una alimentación
saludable es caro.
Es
evidente que la persona desempleada está preocupada de cómo llegar a fin de
mes, pagar todas las facturas y sobre todo si la situación se alarga en el
tiempo todavía más. No me cansaré de decir que hay que comer de forma saludable
siempre sea la situación económica que sea, pero en la situación de desempleo
el tema se complica.
¿Cómo podemos realizar una compra inteligente?
El primer
paso es la planificación de los alimentos que
queremos comprar. Para ello, sugerimos los siguientes pasos:
1. Planificar
anticipadamente el menú (diario o semanal, dependiendo de
qué manera realicemos la compra), tratando de incorporar una gran variedad de
alimentos y de respetar las raciones de la pirámide.
2. Pensar
qué comidas se harán en la semana, y quién
comerá en casa.
3. Prestar
atención a ofertas o listas de precios de
alimentos que podemos encontrar en los periódicos o revistas. Compare precios y
calidad, no elija sólo por marcas.
4. Repasar
la despensa de su cocina, para no comprar algo que todavía
tengamos en suficiente cantidad.
5. Confeccionar
una lista con los alimentos a comprar, con
tres columnas: alimentos frescos (ej: leche, queso, carnes), no perecederos
(ej: arroz, azúcar, cereales) y congelados; de esta forma le daremos un orden a
la compra, y evitaremos pérdidas de calidad de los productos.
6. Finalmente y no
por ello menos importante, como en lo que respecta a precios del mercado mucho
no podemos hacer, debemos usar alimentos de temporada.
Tenga en cuenta que, al planificar el menú y la
compra...
ü Ahorra
tiempo.
ü Ahorra
dinero.
ü Logra más
variedad en sus comidas.
ü Satisface
las necesidades nutricionales.
La desventaja para muchas familias es justamente la elaboración. Por
ejemplo el jugo de naranjas puro, en lugar de mandar al hijo a la venta a
comprar la cajita de jugo o comprarla en el supermercado, toca exprimir las
naranjas y servirlas, y eso requiere un mínimo y a veces, o no hay voluntad o
falta tiempo para hacerlo, es el argumento de algunas madres y padres de
familia.
Y
por ejemplo, si las frutas no están dulces, pueden hacerlas en batidos.
Personalmente
mi conclusión es que los alimentos sanos pueden ser muy caros, pero nosotros
también podemos lograr una dieta sana y equilibrada a buen precio. ¿Vosotros
que opináis al respecto?
“Comer
sano y Natural no debe ser caro ni complicado… si bien algunas cosas cuestan un
poco más…Enfermarse, medicarse e ir al doctor es mucho más caro”
María José Ruiz Vázquez Bióloga, Nutricionista y
miembro del Grupo de Investigación y Acción 2.
Excelente artículo compañera.....me encanta el formato al escribirlo. Felicidades!!!!!!!!!!
ResponderEliminarMuchas Gracias Javier !!!!
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